La vitamina B2, perteneciente al complejo vitamínico B, forma parte del grupo de vitaminas solubles en agua ( vitaminas hidrosolubles) al igual que las demás vitaminas pertenecientes al grupo “B”. En concreto, la vitamina B2 fue descubierta en 1933 e interviene en ciertos procesos que tienen que ver con las enzimas encargadas de la respiración celular, el sintetizado del ácido graso y el buen funcionamiento ocular (más concretamente de la córnea, ayudando a prevenir los problemas de cataratas), entre otros. La necesidad de ingesta diaria de esta vitamina varía en función de la dieta y las calorías que el sujeto ingiera mediante la misma, necesitando aumentar la dosis de vitamina B2 en función de cuanto más calorías se ingieran, aunque la recomendación media suele rondar los 1,5 mg por persona adulta.
Exceso y déficit de vitamina B2
Al ser una vitamina hidrosoluble, un posible exceso de dicha vitamina no sería a priori perjudicial para el sujeto ya que su eliminación sería bastante rápida mediante la orina, aunque no hay que tomarse dicha toxicidad a la ligera ya que puede generar problemas de visión graves y en cantidades extremas incluso proporcionar una ceguera total irreversible.
Otros de los problemas que ofrece la vitamina B2, esta vez por su déficit y no por el exceso, es que puede degenerar problemas y trastornos sobre la piel como una lenta cicatrización, o problemas bucales tales como la agrietación excesiva en los labios, así como mareos, nervios, anemia, debilidad corporal y fatiga. Una de las posibles causas de un déficit de vitamina B2 en sangre es la falta de lácteos en la dieta, ya que son junto a los huevos los principales generadores de vitamina B2 en nuestro organismo.
Beneficios que aporta la correcta ingesta de vitamina B2 al organismo
La vitamina B2 (o también denominada riboflavina a causa del característico color amarillento que posee dicha sustacia) posee distintas funciones positivas para nuestro organismo, las cuales numeraremos a continuación:
- Complementa la función antioxidante de las vitaminas C y E.
- Ayuda a la vista y a mantener una buena visión ante luces tenues, así como para combatir los problemas de cataratas.
- Ayuda a la regeneración del tejido cutáneo y del cuero cabelludo.
- Ayuda a la buena salud del sistema nervioso.
- Ayuda a mantener las defensas del sistema inmunológico.
- Mejora ciertas afecciones sobre la piel, como por ejemplo quemaduras o heridas, ayudando a su pronta cicatrización y recuperación.
Algunas dolencias como la migraña son tratadas con suplementación y comprimidos de vitamina B2, ya que alivia considerablemente el dolor. También es buena para superar ciertos estados de nerviosismo que puedan degenerar en estrés, insomnio u ansiedad.
Alimentos que aportan una gran cantidad de vitamina B2
- Carnes como la ternera, el cordero y en menor medida el pollo.
- Pescados (la gran mayoría de los pescados contienen vitamina B2)
- Los huevos (es el principal proveedor de vitamina B2 para nuestro organismo)
- Leche y sus derivados
- Vegetales varios (espinacas, espárragos…)